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Deià es uno de los pueblos con más encanto de Mallorca. Se encuentra al noreste de la isla, en plena Sierra de Tramuntana. Está en una zona de acantilados abruptos junto al mar y rodeado de montañas, ¡tiene lo mejor de ambos mundos! Hay desde calas de agua turquesa donde relajarse al sol hasta caminos por donde disfrutar de la montaña con unas vistas de escándalo. No podemos olvidar la preciosa arquitectura del centro del pueblo, con calles adoquinadas y casas antiguas de piedra en un entorno idílico. Aunque sea pequeñito, ¡no te faltarán cosas que ver en Deià!
Deià solo tiene unos 700 habitantes, pero durante los meses de verano se llena de visitantes dispuestos a disfrutar de su atractivo mediterráneo. De hecho, sus paisajes han inspirado a muchos artistas hasta el punto de comprar casas allí. A continuación compartimos los mejores lugares que ver en Deià y un montón de planes chulos para que disfrutes al máximo de este pueblito mallorquín.
10 COSAS QUE VER Y HACER EN DEIÀ
1. Pasear por las calles empedradas de Deià
La mejor forma de absorber el ambiente tan especial de Deià es paseando por sus calles estrechas. En su día, la mayoría de casas de piedra de Deià pertenecían a payeses que cultivaban los campos. Ahora, con la explosión turística del pueblo, algunas se han convertido en pequeñas galerías de arte perfectas para curiosear.
No olvides ponerte calzado cómodo para perderte por las calles bohemias de Deià. Están llenas de cuestas empinadas, con la ventaja de que cualquier esquina puede sorprenderte y tener una vista espectacular 
2. Sacar fotos de postal desde los mejores miradores de Deià
El paisaje de Deià hace las delicias de cualquier amante de la fotografía. La combinación de montañas rocosas cubiertas de vegetación, el azul intenso del mar y las casas de piedra amontonadas sobre la ladera de la colina a distintos niveles crea un paisaje de postal. Hay varios puntos elevados del municipio con panorámicas estupendas. Puedes encontrar la ubicación exacta de los mejores miradores en el mapa del final de este artículo.
3. Pasar un día navegando en busca de las mejores calas
Ningún viaje a Mallorca estaría completo sin darse un chapuzón en sus playas. Cala Deià es la más cercana al pueblo. Protegida entre acantilados cubiertos de pinos, es una cala pequeñita con agua de un color turquesa intenso.
Se tarda una media hora en llegar andando desde el centro de Deià (¡recuerda llevar suficiente agua para la subida de vuelta!) – pero la caminata merece muchísimo la pena para disfrutar del paisaje. Ten en cuenta que durante los meses de verano se llena de gente. Por eso, la mejor opción para disfrutar de un chapuzón sin agobios es alquilar un barco y navegar en busca de calas y cuevas que solo tienen acceso por mar. ¡Alucinarás con los mil tonos de azul del agua mientras navegas por las costas mallorquinas!
4. Alquilar una villa de lujo
Deià es un lugar perfecto para pasar unas vacaciones de desconexión bien rodeado de los tuyos. Su ambiente tan sereno lo ha convertido en uno de los pueblos con más villas vacacionales de lujo. Y es que ¿quién se puede resistir a pasar unos días disfrutando de una casa de pueblo junto al mar acompañado de sus personas favoritas?
Hay muchísimas villas de lujo en Deià: desde casas más pequeñas con pocas habitaciones hasta auténticas mansiones pensadas para grupos. Muchas de estas villas tienen piscinas espectaculares con vistas y terrazas perfectas para compartir largas sobremesas disfrutando de la calidez mediterránea. En definitiva, nos parecen una opción perfecta para aprovechar cada segundo del viaje con familia y amigos en un entorno idílico con total privacidad.
5. Alucinar con las vistas desde Son Marroig
La villa de lujo particular del Archiduque Luis Salvador de Austria fue la impresionante mansión llamada Son Marroig. La vivienda se construyó a finales del siglo XV y fue propiedad de un par de familias pudientes mallorquinas antes que el Archiduque la comprara en 1877.
El edificio alberga un museo dedicado a la figura del Archiduque Luis Salvador. Aunque esta parte histórica no te resulte muy interesante, merece mucho la pena visitar la propiedad, pasear por sus estancias y quedar boquiabierto con las vistas desde las diversas habitaciones. La entrada cuesta 4€. Durante los meses de verano, Son Marroig alberga el Festival Internacional de Música de Deià. Es una oportunidad genial para deleitarse con música clásica en un entorno de película.
6. Contemplar Sa Foradada durante la puesta de sol
Desde Son Marroig verás una curiosa península rocosa que se adentra en el mar. Se trata de Sa Foradada, que se traduce al español como “la agujereada” por una razón obvia: el curioso agujero redondo que hay en la roca. Dice la leyenda que fue consecuencia de un cañonazo en una batalla durante el siglo XVI.
La terraza de Son Marroig tiene una orientación inmejorable para ver el atardecer con vistas directas al mar y Sa Foradada. Es indudablemente uno de los mejores lugares de Mallorca para ver la puesta de sol. Recomendamos llegar temprano porque el espacio de aparcamiento es limitado y suele llenarse rápidamente, sobre todo en verano.
7. Disfrutar de una cena con vistas, un planazo romántico que hacer en Deià
Tras ver uno de los mejores atardeceres del Mediterráneo en Sa Foradada, no se nos ocurre mejor plan que disfrutar de una buena cena a la luz de las velas con vistas al mar o las montañas. Aunque Deià es un pueblo muy pequeño, no faltan restaurantes para todos los gustos. Muchos de estos locales tienen una ubicación privilegiada sobre un acantilado, ofreciendo una panorámica espectacular. Aquí van unas cuantas recomendaciones 
- Restaurant Es Pi. Ubicado en la carretera entre el pueblo y Son Marroig, la vista panorámica del mar y las montañas no podría ser mejor. También tienen una zona de chill out perfecta para tomar algo.
- Sebastian. Comida increíble en un entorno idílico. Lugar genial tanto para una cena espontánea como para una ocasión especial. Es muy recomendable reservar.
- Restaurante Nama. Platos de inspiración asiática con buen ambiente y vistas. Estupendo si quieres un descanso de la dieta mediterránea.
- El Olivo. Perfecto para una cena romántica u ocasión especial. Entorno mágico, servicio impecable y platos de alta cocina. Su menú degustación de 7 platos cuesta 170€.
- Ca’s Patro March. Localización espectacular al lado de Cala Deià. Tiene una terraza sobre el agua muy agradable y sirven buen marisco. Se ha hecho muy popular en redes sociales, así que conviene reservar con bastante antelación para asegurarte una mesa, especialmente si quieres vistas directas en primera fila.
- Café-restaurante Sa Font Fresca. Opción económica para desayunar o almorzar rico. Tienen menú del día por 13,50€.
8. Curiosear la casa-museo de Robert Graves
El encanto de Deià ha atraído a muchos artistas y celebridades como Pablo Picasso, Michael Douglas o Pierce Brosnan. El escritor británico Robert Graves se suma a la lista de residentes célebres del pueblo donde murió en 1985. Pero dejó un pedacito de él para siempre en Deià: su casa.
La casa-museo Robert Graves se mantiene exactamente como estaba cuando era hogar del artista. Podrás ver un documental sobre su vida y obra, observar de cerca el mobiliario original e inspirarte paseando por el jardín. La entrada cuesta 10€.
9. Aprender sobre el pasado de Mallorca en el Museo Arqueológico
¿Sabías que Deià es uno de los sitios de la isla donde se encontraron restos arqueológicos milenarios? De hecho, allí hallaron las primeras pistas de ocupación humana en Mallorca. Puedes ver estos restos arqueológicos, herramientas milenarias, muestras de pinturas rupestres en las cuevas y artesanía de cerámica en el Museo Arqueológico. Está ubicado dentro de un antiguo molino harinero.
La entrada es gratuita, pero ten en cuenta que el museo está cerrado de noviembre a marzo durante la temporada baja. Durante el resto del año, conviene consultar el horario porque cierran varios días a la semana. También organizan algunos talleres y charlas culturales interesantes.
10. Visitar la iglesia de San Juan Bautista y el cementerio
Para terminar con esta lista de lugares que ver en Deià, no podíamos olvidar la iglesia con mejores vistas del pueblo. Dedicada a San Juan Bautista, se alzó originalmente en el siglo XIV, aunque tuvo que ser reconstruida tras un incendio en 1752. Destaca su inusual campanario en forma de torre defensiva flanqueada por cañones.
Tendrás que hacer el esfuerzo de subir algunas calles empinadas para llegar hasta la iglesia, pero una vez arriba tendrás una gran recompensa. Esta iglesia parroquial destaca por su ubicación en la zona más elevada de Deià, ofreciendo unas vistas increíbles 360º de la Sierra de Tramuntana y el Mar Mediterráneo. Al lado encontrarás el cementerio municipal, donde se encuentra la tumba de Robert Graves.
UBICACIÓN DE LOS MEJORES LUGARES QUE VER EN DEIÀ
En el siguiente mapa encontrarás la ubicación de todos los lugares que ver en Deià que mencionamos a lo largo del artículo. Esperamos que te sirva para planificar tu visita a este pueblo mágico
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