La Ópera de Sydney es uno de los iconos de Australia y uno de los edificios más emblemáticos de la arquitectura expresionista. A parte de tener una gran historia, también esconde muchos datos curiosos. En este post os contaremos 18 curiosidades de la Ópera de Sydney para que conozcas más a fondo uno de los edificios más fotografiados del mundo. ¿Vas a estar en Sydney pronto? Te damos información útil y consejos para visitar la preciosa ópera de Sydney.
Compartimos las mejores cosas que ver y hacer en Sydney, ¡planes para todos los gustos!
Te recomendamos las mejores zonas y hoteles donde alojarse en Sydney.
¡No olvides contratar un seguro de viaje con 5% de descuento antes de aterrizar en Australia! Es imprescindible en un país tan remoto donde cualquier susto puede salirte muy caro. Estarás cubierto ante cancelaciones de transporte, pérdidas de equipaje, robos, accidentes de requieran atención médica y mucho más. En definitiva, tendrás asistencia en español 24/7 en caso de cualquier imprevisto.
El vidrio utilizado en la construcción del edificio es exclusivo de la Ópera de Sydney y proviene de Francia. Fue encargado por los constructores y hecho a medida para la ocasión, por lo que no hay ningún otro edificio del mundo que lo use.
El edificio acabó costando casi 15 veces más de lo previsto. Finalmente, el costo de la construcción fue de 102 millones de dólares australianos (unos 60 millones de dólares o euros aproximadamente), en lugar de los 7 millones previstos en el presupuesto inicial. Este fue uno de los principales motivos por lo que la obra se paralizó durante unos meses.
En el terreno sobre el que se asienta la Ópera de Sydney había un conocido fuerte, ubicado en una posición más que estratégica sobre la Bahía de Sydney para vigilar todos los movimientos de las embarcaciones.
Otra de las curiosidades de la Ópera de Sydney es que está formada por tres edificios diferentes que dan la impresión de ser uno solo. Unos 10.000 trabajadores participaron en su construcción y la ópera fue inaugurada por la reina Isabel II el 20 de octubre de 1973, meses después de la conclusión de la obra.
La Ópera de Sydney mide 187 metros de largo y 115 metros de ancho, dimensiones que superan el tamaño de un campo de fútbol. Se asienta sobre 5.798 hectáreas de tierra, un espacio dónde cabrían 8 aviones Boeing 747.
¿Sabías que hay un órgano con 10.154 tubos dentro de la sala de teatro de la Ópera Se tardó 10 años en fabricar y ensamblar. Una vez terminado, se trata del mayor instrumento de música mecánica del mundo. ¡Una de las curiosidades de la Ópera de Sydney que todo amante de la música debería saber!
La Ópera de Sydney tiene seis salas para espectáculos. La más grande y conocida es la sala de conciertos, que tiene capacidad para casi 3.000 espectadores. Pero en la ópera no solo se muestra arte. También hay un estudio de grabación muy prestigioso para músicos y cineastas.
Eugene Goossens, uno de los principales impulsores de la construcción, quería que la Ópera estuviese en Bennelong Point. Es un lugar muy significativo a nivel histórico porque allí se celebró el primer concierto en la ciudad en marzo de 1791, protagonizado por 24 aborígenes. Finalmente, Goosens logró su objetivo. ¡Y la verdad es que es un lugar idóneo para destacar un edificio tan llamativo!
Por tareas de mantenimiento, anualmente se cambian 15.500 bombillas en la Ópera de Sydney. ¡Casi nada!
La primera persona en actuar en la Ópera de Sydney fue Paul Robeson y lo hizo pese a no estar acabada. Sucedió en 1960, cuando cantó Ol ‘Man River a los trabajadores de la construcción mientras comían el almuerzo.
En los años 80 una gallina cayó encima de la cabeza de un músico de la orquesta mientras estaba actuando en el Teatro de la Ópera. El animal era parte de la obra “Boris Godunov”, pero obviamente todavía no era su momento de aparecer en escena. Para evitar que se repitiera algo similar, se instaló una red encima de los músicos.
Más de 350 kilómetros de cable de acero se utilizaron en la construcción; lo suficientemente largo para conectar Sydney con Canberra (o Barcelona con Zaragoza, si quieres una comparación más familiar )
El danés Jørn Utzon ganó el concurso para diseñar el edificio pese a no haber estado nunca en Sydney. Pero tenía una gran ventaja: la experiencia naval que le sirvió para estudiar la forma del puerto y la ubicación de la Ópera.
Tres jueces rechazaron el diseño de Utzon en el concurso, pero el prestigioso arquitecto americano Eero Saarinen también formaba parte del jurado y convenció a la resta de que Utzon tenía que ser el elegido por delante de otros 232 proyectos. El ganador se adjudicó la modesta cantidad de £5000 como premio, bastante poco para la gran repercusión del proyecto a nivel mundial.
Se cree que Jørn Utzon se inspiró en diseño del techo arqueado de la ópera mientras estaba pelando una naranja. Hay otras fuentes que dicen que el arquitecto danés se inspiró también en caracoles, hojas de palma y templos mayas. En cualquier caso, una muestra más que la naturaleza sirve como gran fuente de inspiración para los arquitectos.
Pese a ser la obra más destacada del arquitecto danés, nunca llegó a verla completada. Tras tener problemas con el gobierno durante la construcción del edificio, Utzon se vio obligado a abandonar Australia y nunca más regresó. Sin embargo, será recordado para la eternidad.
El concierto más grande celebrado en la Ópera de Sydney en términos de asistencia fue de la banda Crowded House en 1996. Se calcula que se congregaron unas 150.000 personas en los alrededores del edificio para despedir a la mítica banda de rock.
La última de nuestras curiosidades de la Ópera de Sydney tiene que ver con un personaje famoso. Schwarzenegger ganó su último título Mr. Olympia en un evento que se hizo en la Ópera de Sydney. Fue un concurso muy polémico y sorprendente, ya que el actor decidió presentarse un día antes de que se celebrara, cuando ya había dejado el culturismo profesionalmente.
La entrada 18 curiosidades de la Ópera de Sydney se publicó primero en Los Traveleros.